Éxito corderil en las ligas de verano

Apenas si ha acabado la temporada oficial, y mientras la mayoría de las personas de bien están en la playa, en la montaña o en el coche atascado en alguna carretera, los chicos de Gran Cordero hacen lo que mejor saben hacer: meter. En las famosas Ligas de Verano del Ramiro de Maeztu hemos visto diversos equipos formados por jugadores corderiles. En el 3 para 3 de la Demencia jugaron los "Estopa Mix" ( Dani y Miguel Alonso, Lorenzo y Ortiz) y "El Combo" (Jorge y Nachete). A pesar de contar con un difícil calendario sólo el empuje de los temibles ICD pudieron con ellos. Los Estopas fueron derrotados en octavos y los Combitos estos en cuartos, con la bronca habitual.

En estos momentos se está dispuntando la liga de la tienda del Estudiantes donde Gran Cordero participa como equipo con los mencionados antes menos Lorenzo y más Simón y donde Jorge sigue practicando el transfuguismo más vil en otro equipo. Al cierre de esta edición, el equipo corderil se había clasificado para cuartos de final mientras los de Jorge y Nacho estaban eliminados. Los próximos rivales serán unos payasos que van de amarillo. Y no, no son los Cruanias.

Todos estos torneos no son más que una puesta en forma para lo que será el gran evento de la pretemporada: la Lamb Cup 2003. Para dicho evento es posible que vuelva el director deportivo y ya hay tres nombres que suenan con insistencia como rivales del Cordero: los Campamento Kings (vigentes campeones), los Freak Brothers ( nos invitaron a su torneo) y El Combo ( si es que siguen existiendo). Es más que probable que a Gran Cordero le toque Combo en semifinales. Sólo voy avisando. La edición de la prestigiosa Lamb Cup pretende ser excusa para la entrega de premios varios: la retirada de camiseta de Dani Pacios, la mítica canasta del Euro, la entrega a Rubén de su banda de Hombre Cordero... y sobre todo, servirá de escenario para la grabación de un vídeo promocional que podrán adquirir todos aquellos miembros de la Fundación que renueven este año su abono.

En fin, compañeros, todavía es julio y ya se me ponen los pelos de punta.