El tobillo vence de momento a Dani Alonso
A última hora del domingo llegó a las redacciones una convocatoria de rueda de prensa para la mañana del lunes.
No se esperaba sorpresa alguna. Todos pensábamos que se trataría de dar el parte médico tras las dos lesiones del domingo o quizás
de uno de los habituales desmanes verbales de Coque. Nada que se salga de lo previsto.
Sin embargo, al poco de empezar la rueda de prensa, Dani Alonso, acompañado de Guille Álvaro y Guille Ortiz, con gesto serio indicó que "tenía que leer un comunicado".
Con voz entrecortada, el mítico alero corderil anunciaba su retirada momentánea de las canchas debido a sus continuas lesiones de tobillo.
"Entro en la cancha pensando que me voy a lesionar y esto me está empezando a afectar a mi vida normal", afirmó Alonso, concluyendo "pese a lo mucho que amo este deporte,
me veo obligado a anunciar hoy mi retirada, por lo menos en lo que queda de año y hasta que mis tobillos se arreglen definitivamente."
Ni el jugador ni los directivos aceptaron preguntas.
Las reacciones no tardaron en llegar. Fer Cabezas, compañero de Dani Alonso en los últimos cuatro años, y enemigo confesado dentro del vestuario mostró su pesar ante la noticia
aunque, cuando los micrófonos estaban bajos, afirmó: "Un rival menos para el Hombre Cordero de este año".
En términos parecidos se expresó Modorro -"así ya me las puedo tirar yo todas"- y Dani Aubareda -"por fin tengo el dependiente que soñé para mi tienda". El único que mostró un dolor verdadero
y auténtico fue Guille Ortiz, un tipo sensacional.
Esta redacción intentó contactar con Guille Álvaro pero fue imposible localizarle. Probablemente estuviera en Ikea. El presidente, Coque Álvaro, deseó la pronta vuelta a las canchas
del alero sobre el que construyó su proyecto ganador y no descartó la celebración de un partido homenaje con fiesta posterior.
"Y si luego vuelve, al menos la borrachera de ese día no nos la quita nadie", concluyó este hombre del que tanto han aprendido sus hijos. Unos más que otros.
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