Un disgusto bien gordo

Gran Cordero inició su andadura en el Trofeo de Primavera igual que acabó el de invierno: perdiendo en la última jugada. Con el partido 48-41 y dos minutos por jugar un par de canastas de Jorge y Miguel pusieron el partido en un puño. A falta de 35 segundos el 5 de Guadalupe se fue de todos pero falló una bandeja fácil, Guille cogió el rebote la pasó a su derecha donde se encontraba Eduardo completamente solo y sin pensárselo enchufó el tiro que empataba el partido. Con unos 10 segundos por jugarse, Gran Cordero prefirió no hacer falta y presionó en todo el campo, pero tras una buena defensa el balón llegó al 13 que consiguió la última canasta del partido y una falta con el tiempo a cero. De todos modos, no se puede decir que el Cordero perdiera el partido en esa jugada: lo había perdido antes otras dos veces. Primero con dos cuartos desastrosos en los que sólo anotaron 12 puntos y luego cuando remontaron hasta once puntos, se pusieron uno arriba en el tercer cuarto y lo volvieron a tirar todo en un par de minutos. Aún así, hay que reconocer que pese a que nuestros chicos no estuvieron demasiado acertados, en ningún momento dejaron de intentarlo, como lo prueba la remontada final, y si el triunfo hubiera caído de su lado, no podría decirse que no se lo merecieran. Sin embargo, este nuevo Gran Cordero demostró que hay cosas que aún tienen que mejorar: en primer lugar el ataque estático, en segundo lugar (una vez más) la defensa del contraataque. El hecho de que varios de sus jugadores no hayan jugado juntos nunca se nota mucho a la hora de entenderse, y sólo en los minutos en los que Guille, Miguel, Eduardo y Dani Aubareda, los cuatro jugando desde hace la tana coincidieron en la pista, se vio de lo que este equipo es capaz. Los debutantes mostraron todos buenas maneras: el mejor hoy fue Eduardo, sobre todo por su decisión en ataque en los últimos minutos, pero los demás no desentonaron: Álvaro aportó defensa, que buena falta hace, Lorenzo tuvo unos minutos mágicos en el tercer cuarto que ayudaron decisivamente a empatar el partido, y Miguel Alonso como siempre hizo de todo: puntos, rebotes... y mucha garra. Este resultado puede ser clave para las aspiraciones corderiles. En este momento la única esperanza de clasificación pasa por una victoria clara contra Lo Marrón el próximo sábado (12,45 Polideportivo, retransmitido por Telemadroño) y una derrota de guadalupe en la última jornada. Guadalupe sabe que con ganar los dos partidos están clasificados, aunque algún día le llegarán las vacas.... flacas.