Cuarta victoria consecutiva de un Gran Cordero lanzado

Este equipo es mejor que el del año pasado y poco a poco se va viendo. Ante uno de los rivales que más incomodaron en la temporada anterior, La Negralada, Gran Cordero se dio un festín de robar balones y correr contraataque consiguiendo una más que convincente victoria (67-18). Cierto es que los de La Negralada tenían una torrija encima importante, pero, bueno, al fin y al cabo iban los terceros y a estas alturas eso es decir algo.

Quizás lo más importante del partido sea que Gran Cordero anotó 67 puntos a pesar de no contar con sus dos mejores anotadores: Lorenzo y Dani Alonso ni con un gran defensor como Rubén A. Barracus. El año pasado pensar en ganar sin Dani ni Lorenzo se hacía muy cuesta arriba pero ganar de 49 ni te digo. El partido empezó con serios problemas puesto que la defensa planeada por Ortiz no resultó. El primer cuarto acabó con un inquietante 14-12 motivado por los fallos de la defensa interior y porque el de la mesa- curioso personaje- apuntó al contrario una canasta corderil. Fue cambiar la 3-2 presionante por una 2-3 a mitad de cancha y no se supo más de los de blanco. En el resto del partido (36 minutos) metieron seis puntos, así que háganse a una idea.

Hubo tiempo para que todo el mundo jugara y todo el mundo lo hizo bien. En la dirección se alternaron perfectamente Feerrr, David y el joven Cabezas, incordiando siempre al contrario y sabiendo llevar el contraataque. Esto sirvió para que Simón pudiera jugar por dentro y configurar un triple poste temible junto a Carlos y Modorro (espectacular partido el suyo una vez más). Entre ellos tres y Arturo sellaron la canasta propia y martillearon la contraria con rebotes y unos para uno. Incluso el gran Lechal tuvo sus momentos de gloria cuando se lió a meter bandejas y fallar tiros libres. Causó mucha hilaridad el primero de ellos, el que casi no toca ni tablero. Con las rápidas carreras y pases de Aubareda la ventaja fue creciendo hasta tal punto que Ortiz decidió sacarse a sí mismo ante la indignación de la Bisbal. La Negralada entró en estado de pánico y sólo consiguieron parar al veloz escolta lanar con continuas faltas. A los cuatro minutos el organismo de Ortiz dijo basta y volvió al banquillo de donde jamás debió haber salido.

Con esta victoria Gran Cordero se aúpa al tercer puesto, posición que habrán de defender ante Andalucía CB el próximo día, último partido antes del parón navideño.