Gran Cordero presenta su candidatura al liderato

Como en los viejos tiempos. En un partido lleno de ilusión, garra y buen juego Gran Cordero se impuso a los líderes, Miraobras, por 57 a 46. El marcador es algo engañoso. Si bien el equipo lanar dominó todo el partido, también es cierto que la diferencia nunca superó los diez puntos. Miraobras demostró ser un rival de calidad, mucho más motivado que el año pasado, en cuyos dos encuentros dieron una mala imagen. Este año no. Demostrando la calidad de su juego exterior se mantuvieron dentro del partido hasta los últimos instantes, en los que bien pudieron haber dado la vuelta al resultado.

El partido empezó con un triple del 15, posiblemente su mejor jugador, pero pronto Modorro empezó a imponer su ley y a base sobre todo de rebotes en ataque dio a Gran Cordero su primera diferencia importante (12-4 min.6). Los de Miraobras se dieron cuenta de que si seguían así les iba a caer otra paliza, así que rectificaron a tiempo y se pusieron en una defensa individual. Hay que reconocer que eso descentró un poco a nuestros jugadores y es que cuando se defiende fuerte y la árbitro no se entera de nada pues es complicado atacar. Mención aparte merece la de gris, que no pitó ni una en los dos primeros cuartos pero compensó de alguna manera en los dos últimos pitando bastantes paridas. Al final del primer cuarto, entre unas cosas y otras, el resultado era 14-9.

Un triple de Simón al poco de empezar el segundo período llevó la diferencia a ocho (19-11). Los cambios no mermaron el potencial corderil y pudimos asistir al regreso de Lorenzo a las canchas después de tres meses. Se le notó un poco falto de forma pero por lo menos no pegó a nadie ni se autoinfringió daño alguno. Gracias a las penetraciones del 11, Miraobras se mantenía en el partido (24-19) y un triple en el último segundo evitó el primer alejamiento lanar, llegando al descanso con un apretado 27-22.

Era para estar contentos. Se estaba jugando un buen partido ante un buen equipo, pero es cierto que la diferencia no era como para confiarse. con los titulares de nuevo en cancha y una nueva dosis de modorrismo, Gran Cordero alcanzó su máxima diferencia (36-26), enjugada rápidamente por siete puntos consecutivos del 15, que dejaron la cosa 39-34 para empezar el último período.

Los problemas de los pivots lanares con las personales hicieron que Arturo tuviera que asumir responsabilidades. Y vaya si lo hizo. Cuando más calentaba el sol y con los miraobros colando triples sin parar, una canastita de tres metros y un tiro libre sirvieron para que el cordero se aferrara al liderato mientras Modorro descansaba. Pese a todo, la reacción miraobrina llegó a preocupar a más de uno (44-43 a falta de siete minutos). Apareció entonces, gigantesca, la figura de Dani Alonso. Un triple suyo dio tranquilidad y entre Jaime y Jorge se dedicaron a sentenciar el partido con canastas fáciles. La defensa funcionó a la perfección como casi todo el partido y sólo permitió una canasta más del rival. Al final, 57-46, victoria que permite seguir soñando a Gran Cordero con los playoffs y que supone una inyección de moral muy importante ante el decisivo compromiso de la próxima semana contra Limonchelo.