MADRUGAR POR EL CORDERO

Me he levantado esta mañana muy temprano para ir a ver a nuestro amado equipo Gran Cordero, la cita era a las 10:15, pero como buena Cordera Fanática que soy he decidido ir antes, así que a las 10 de la mañana llegaba al Polideportivo Morscardó, y he sido recibida como bien me merezco, los corderos han repartido sobre mis mejillas y mano derecha besos a diestro y siniestro, así me gusta, veo que vais aprendiendo y que cada vez tenéis más ganas de luchar por el título de "hombre cordero".

Ha sido una mañana gris, quizás esto podría haber empañado la moral de nuestros jugadores pero no ha sido así, aunque el cielo fuera gris, hiciera frío y lloviera (menos mal que jugabais a cubierto) nuestros chicos lo han dado todo. ¿Contra quién? Hincaitos se llamaban, ya solo por el nombre merecían perder, gracias a ellos también he podido comprobar que en Gran Cordero la belleza reluce por todas partes, que corderos tan guapos. Aunque aún me cuesta un poco enterarme de todo lo que pasa en el campo de juego he podido ver como al principio parecíais algo despistados, pero enseguida habéis cogido confianza y lo habéis dado todo. Soy los mejores (se ve que aún estoy cegada por las legañas, jejeje....). ¿Quién ha ganado? Pues quien va a ser.

Detalles de la segunda jornada. Para empezar el momento de desconcierto, por mi parte, al verme sola de nuevo como aficionada, pero pronto han llegado los refuerzos, como no Teresa, que como yo no se pierde una (eso es afición y lo demás es tontería) y Ainhoa (si Guille, en esta ocasión era Ainhoa), Lucia te he echado de menos. Las risas con Ainhoa que han sido continúas, desde que ha llegado hasta después del partido, incluyendo los despistes ¿qué demonios acaba de pitar el arbitro? ¿en qué cuarto estamos? ¿¡ya ha terminado el tercer cuarto!?, ¿y el segundo cuando ha sido? La bombilla-silbato del arbitro, que naranja tan intenso. Carlos por los suelos cada dos por tres. Dani Pacios las quejas quitan puntos. Por fin me he aprendido el nombre de todos, me ha costado pero lo he conseguido, temblar ahora sé quien es quien. Mención especial para el primo de Guille, Simón... (lo siento no me acuerdo de tu nombre, ¡qué queréis, mi memoria es relativa!), que ha intentado mantenernos a Ainhoa y a mí informadas. Lo difícil que está siendo dar los votos particulares para ser "hombres corderos", sois todos muy buenos. Y para terminar 10 coca colas y una cerveza, ahí queda eso. ¡Salud!

¡¡Un saludo corderos!!